¿Guerra contra el terrorismo o contra Islam?
By Caryle Murphy
Lo que sienten los musulmanes americanos al comienzo del Ramadán es el endurecimiento de las actitudes contra ellos.
La noche del pasado sábado 8 de octubre, cerca de cincuenta estudiantes musulmanes entraron en el aula de la Universidad de George Mason, en el campus de Arlington, USA, para escuchar una conferencia de tres días sobre Islam y modernidad que tuvieron que oír en DVD.
El conferenciante era el musulmán intelectual residente en Ginebra Tariq Ramadán, que no pudo asistir personalmente porque su visa para entrar en USA fue revocada, a pesar de que sus moderadas palabras sonaran como un mensaje que la oficialidad americana hubiera aplaudido. Urgió a emprender un dialogo serio sobre los valores universales que compartían Islam y Occidente y añadió: “No podemos culpar a Occidente de nuestros problemas.”
“Fue más triste que otra cosa” dijo Sahed Amanullah sobre la decisión de impedir a Tarik Ramadan entrar al país. “Nos exigen un nivel de perfección imposible” añadió. “La gente no presta atención a lo que decimos, sólo buscan una razón para desconfiar en nosotros”.
Ayer los musulmanes empezaron el ayuno del mes de Ramadán, periodo durante el practican la disciplina espiritual y profundizan en la fe. Pero el incidente de la Universidad George Mason, ha producido más desconfianza y desilusión que ningún otro incidente desde los ataques terroristas del 2001.
Durante las semanas que siguieron al 11 de Septiembre, los musulmanes americanos se enfrentaron a un resentimiento que incluía violencia. Pero muchos de ellos consideraron que era una reacción temporal comprensible que se compensaba por numeras muestras de simpatía hacia los musulmanes de los vecinos y los compañeros de trabajo.
Tres años más tarde, muchos musulmanes dicen que la atmósfera se ha vuelto mucho más negra. Las reacciones anti musulmanas se están endureciendo en los discursos públicos, y los grupos de abogados musulmanes informan sobre el incremento del odio las imputaciones delictivas y la discriminación.
Los lideres de esos grupos señalan que los actos continuos de violencia de los terroristas musulmanes, especialmente los realizados en Irak, están contribuyendo al deterioro de la imagen de Islam en el país. Pero esto se empeora, además, por los constantes ataques contra Islam de los locutores de radio y televisión y de algunos lideres religiosos.
Una encuesta nacional reciente señala que casi uno de cada tres americanos responden negativamente cuando oyen la palabra “musulmán”.
Ibrahim Hooper, portavoz del Consejo para las relaciones Musulmano-Americanas, en Washington, que fue el encargado de realizar la encuesta, dijo que recibe mas de 800 correos electrónicos contra Islam o contra los musulmanes en los dos últimos años. “El empeoramiento de esos mensajes se ha elevado de forma alarmante comparado con el periodo inmediatamente posterior al 11 de Septiembre” señalo.
Muchos musulmanes americanos creen que el el Gobierno USA, ha contribuido a reforzar los sentimientos anti musulmanes al tratarlos más como enemigos que como aliados en la lucha contra el terrorismo. Dicen que el Gobierno demuestra esto obligando a los musulmanes a un registro especial en los aeropuertos, investigando las asociaciones benéficas de los musulmanes y deteniendo a musulmanes que luego resultaron inocentes de cualquier delito. Todo ello hace crecer la percepción que la guerra contra el terrorismo se ha vuelto una guerra contra Islam.
“He oído decir esto a mucha gente, especialmente a musulmanes moderados que nunca espere que pensaran así” ha declarado Said Muhammad Magid, que es imán de ALL Dulles Society, en una mezquita de Sterlig.Aparte de otros musulmanes, Magid, dijo que teme que existan “algunos elementos en la Administración Bush, que intentan desmantelar las organizaciones musulmanas y destruirlas. Es muy perturbador”
Los emigrantes se sienten especialmente vulnerable. Osama Abu Irshaid, un palestino de treinta años que vive en Annadale, y edita un periódico critico con la política USA en el Medio Oriente, dijo que el y sus amigos evitan cuidadosamente decir algo mediante el teléfono que el FBI pueda interpretar como un mensaje codificado. “Cuando estamos juntos, solo hablamos de nuestra ultima fiesta y nuestra ultima excursión” dice.“Un amigo acostumbra a dormir vestido por si es arrestado. No quiere aparecer en la televisión en pijama”, dijo Osama. “Cuando vives esperando lo pero cada día, no es vida” añadió.
Amanullah, de 36 años, que ha nacido en USA, y vive en Fairfax, dijo que se horroriza con la idea de que la guerra del Gobierno contra el terrorismo se haya convertido en un conflicto contra Islam. “Muchos musulmanes no quieren creer esto. Si verdaderamente pensaran así, estarían mucho mas asustados de lo que están ya, pero cuando una persona como Tarik Ramadan es expulsado, piensan ¿podría ser verdad?” Dijo.
Tarik Ramadan, de 42 años obtuvo un permiso de trabajo para USA el pasado abril, contratado por R.Luce, iba a ser profesor de los conflictos religiosos y construcción de la paz en la Universidad de Notre Dame, en el Instituto Joan B. Krok para los Estudios Internacionales sobre la Paz. El permiso fue revocado en Julio basándose en una norma de la USA Patriot Act que prohíbe la entrada a extranjeros que usen su posición de autoridad para apoyar o elogiar actividades terroristas. Tarik Ramadan, quien ha visitado USA docenas de veces, niega cualquier apoyo al terrorismo y ha recurrido para obtener el visado. “Lo queremos aquí porque mantenemos una posición abierta” dijo el portavoz de Notre Dame, Matthew Storin.
Algunos musulmanes dicen que el Gobierno USA ha perdido la oportunidad de enrolar a los musulmanes como socios en la batalla intelectual contra el terrorismo. “Los extremistas han interpretado de forma estrecha el Coran para justificar sus actos,” dice Irshaid, y añade que los musulmanes como el mismo, pueden demolerlos ideológicamente, confrontarse a ellos y desmantelar sus ideas porque usa sus misma referencias, la misma historia y la misma terminología. El Gobierno no puede hacer lo mismo.”
El Consejo para los asuntos Públicos Musulmanes de los Ángeles, ha expresado su desacuerdo en que los musulmanes americanos sean incluidos en el informe de la Comisión sobre el 11 de Septiembre en el apartado de las relaciones USA con el mundo musulmán. Siguiendo las recomendaciones del informe, sobre el desarrollo de la coalición con las naciones musulmanas para combatir el terrorismo, los consejeros aconsejaron que los musulmanes no americanos fueran empleados como consejeros políticos en agencias claves en el trato con el mundo musulmán.
El director del Consejo Ejecutivo, Salam Al-Marayati dijo que esta también disgustado por la respuesta que el Gobierno dio a su organización en un almuerzo reciente organizado por la National Grassroots Compaig para combatir el terrorismo. Entre otras cosas las instrucciones de la campaña incluían entrenamiento por parte de las fuerzas locales para detectar actividades delictivas.
El FBI acepto la iniciativa del consejo pero declino la petición de Al Marayati para asistirá a una nueva conferencia con expertos oficiales del Gobierno para publicar la campaña.
A pesar de estas dificultades, algunos musulmanes dicen que encuentran mucho en común con los no musulmanes cuando coinciden con ellos diariamente en las escuelas, calles y sitios de oración. “Es el sabor de vivir en un pueblo” dijo Afifa Syeed, directora de la Academia Al-Fatih, una escuela islámica en Herndon.La velada Syeed, dijo que cuando recorrió el país en la supervisión el pasado año, “fui puerta a puerta en Loudoun Country que es un area muy conservadora y tuve magnificas conversaciones con la gente sobre desarrollo, transporte y escuelas. Casi nunca conversaciones sobre mi creecia o porque usaba el velo. Esta experiencia me ha demostrado que los musulmanes se auto desestiman sin apreciar cuanta tolerancia hay en la comunidad, que me hecho sentirme mas de los suyos que antes”
El sentido de la pertenecía ha motivado a otros musulmanes a asumir responsabilidades por como otros americanos ven Islam.
Después del 11 de Septiembre, el graduado Amanuallah dijo que encontraba la retórica de muchos lideres musulmanes simplista y naif, y fundo www.altmuslim.com como un foro de discusión de los problemas de la Comunidad Musulmana.
“Estoy asqueado y cansado de oír que Islam es paz, es una conversación asesina, es un pensamiento matador y no tiene sentido. Dijo Amanullah. Muchos americanos quieren saber que los musulmanes dirigimos nuestros problemas incluso sin resolverlos, no quieren oír que todo esta perfecto entre nosotros, es un forma de engaño.”
Caryle Murphy
Redactora del Washington Post
